Lola Lolinha

miércoles, agosto 23, 2006

Pasate El Salero Por El Culo Pa' La Buena Suerte

Lo único que creo de las supersticiones es que son una grandiosa pendejada. Siempre he creído que la gente que cree en ellas son las mismas personas que frecuentan a brujos y a hechiceros y se gastan la quincena en amuletos pendejos para alejar las malas vibras y prevenir la mala suerte. Y si bien dicen que lo que menos soportas lo tienes en tu casa, ayer por la tarde asistí a una cena familiar en casa de mis jefes donde una de mis tías corroboró tal dicho verdadero. Todo iba bien durante la cena, mi jefa había preparado varios platillos típicos mexicanos, y aunque la política no es de mi sumo agrado de todas maneras me sume a ella, nomas pa' chingar a mi abuela. En eso mi tía Lorena interrumpe la conversión con un grito ahogado y le da un zape a mi prima Tanya.

Tía Lorena: ¿Qué estas haciendo pendeja? ¿No te he dicho que no pases el salero directo a las manos, sino que la pongas en la mesa y que ellos lo tomen? (Se quita un colguije ridículo del cuello, se persigna con el y se lo pasa a Tanya) Ponte esto, no quiero que se te pegue la mala suerte.

Dios mio! No podía creer la cantidad de idioteces que escuche y vi en menos de un minuto, y segundos después no me pude contener, me cague de la risa hasta que sentí ganas de volver el estomago. Pero no fui la unica, todos los demás presentes se unieron al coro de carcajadas y burlas. Lo siguiente que hizo mi tía tal vez no tenga nombre, y si lo tiene espero que no sea hereditario. Se paro y comenzo a gritar no sé que tanta pendejada, tal vez nos estaba echando una eterna maldición universal, sepa la chingada. Como me entro miedito de verla toda loca, mejor me retire a la cocina. Cuando volví a salir al comedor, mi tía ya se había ido, y mi abuela estaba llorando porque tenia miedo. Para evitar otra serie de carcajadas, mejor me fui. No mamar, mi familia es todo menos normal.

jueves, agosto 10, 2006

Ay penitas!

Hace algunos días terminé una relación de diez meses y un día que hasta este día, me hace reír cuando estoy a solas. Debo aclarar que no me he vuelto loca, al menos no por completo, simplemente me da risa pensar que por diez meses y un día, viví un "romance" sin querer, y con esto tampoco estoy sugiriendo que alguien me forzó a estar en dicha relación. Digo sin querer porque ni él ni yo estábamos seguros de lo que eramos hasta que me toco presentárselo a mi jefa durante un encuentro en el super. Increíblemente tuve que hacer una pausa para pensar bien si presentarlo como; a) mi novio, b) mi amante, ó c) un buen amigo. Finalmente opte por presentarlo como, a) mi novio. En ese momento lo difícil no eran tanto las opciones que tenia a la mano, (total, que mas da si lo presento como mi amante ó un buen amigo), como después explicarle mi posición a él.

Nunca he sido una persona de grandes romances, de hecho, siempre trato de mantenerme neutral, dándole la preferencia a los acostones sin reclamos ni remordimientos. Y juro que creí que con esta persona las cosas eran justamente así. De vez en cuando salíamos juntos, nos aliviábamos las calenturas, pero nunca hubieron verdaderas palabras de amor, ni cariñitos extremos, ni siquiera una proposición. También habían otros factores que me hacían dudar que fuéramos novios, como por ejemplo, la in-frecuencia con que nos veíamos y el hecho de que él vive entre Miami y Los Angeles, y ya saben lo que dicen por ahí, "amor de lejos, amor de pendejos". El caso es que después de ese encuentro con mi jefa en el super, él no podía creer que me hubiera costado tanto trabajo adivinar que eramos novios, y de ahí todo se fue al carajo. Por ningún motivo trate de justificarme aunque tengo que aceptar que los últimos dos meses sí fueron intensos. La química era obvia y él hasta tenia planes de mudarse permanentemente a Los Angeles. Aun así, al final decidió no quedarse, y así mismo sintiéndose obligado a terminar "lo nuestro" antes de irse a vivir a Rio de Janeiro, se anoto una bien cabrón al sugerir que todo terminaba por falta de comprensión. Pues bien, confieso no arrepentirme de haber ignorado al posible ex-gran amor de mi vida. Que no hubo comprensión, a la chingada con eso. Ese disco ya esta muy rayado. Es más que obvio, pero pendejo el que se aguante la respiración esperando comprensión.

In other news, de nuevo intente visitar a Jussy, y nada nada con una chingada:

Yo: Hello, I'm here to see Jessica C******. I believe she's in room 523.
Recepcionista: Just a second while I verify.
Yo: Sure
Recepcionista: Are you a direct relative?
Yo: No, but I'm her best friend and I really want to see how she's doing.
Recepcionista: I'm sorry darling, but unless you're her sister or her mother I can't let you see her.
Yo: Whyyyyyy? (hice berrinche y todo) It won't take me more than two minutes. I promise!
Recepcionista: She's in intensive care, only direct family can see her at this time.
Yo: Pleeeeeeeeease, I came three other times before...
Recepcionista: Did they let you see her then?
Yo: No because she wasn't in her room.
Recepcionista: Ok then, come back in two weeks. Sorry.
Yo: Okay okay okay, can I at least know how she's doing?
Recepcionista: In two weeks you can. (y sonrie maliciosamente la pinche vieja)
Yo: Yeah, whatever, thanks a LOT!
Recepcionista: Sure thing darling.

Need I say more? Odio los hospitales!! Me cagan la madre!! Grrrrrr....

miércoles, agosto 09, 2006

No Vacancy

Mi depa no es un puto hotel, claro que eso a varios de mis familiares parece valerles madre y siguen llegando y acomodandose y creyéndose que en mi tienen una pinche criada.

Primero llegaron mis abuelos maternos. Ternurita fue verlos llegar hasta que decidieron plantarse en mi recámara y mandarme a dormir a la sala. Mi mamá (que con sus mentirotas se libro de ellos) me aseguro que solo los tendría que soportar por un mes, pero paso el mes y después otro, y otro, hasta que llegamos al cuarto mes y ahí seguían, sin siquiera proponer fecha para largarse. Después llego una tía (hermana de mi mamá) con sus tres hijos. Emputadisima es poco para describir el humor con el que me despertaba todas las mañanas. No dejaban dormir y aparte se comian todo el chingado cereal, porque yo señores y señoras, soy pobre, mi sueldo no me alcanza mas que para comprar cereal, leche, y aveces una dozena de huevos*. Los soporte casi dos meses, y ya casi saboreando las delicias del haberme librado de tanta pinche gente, llega mi hermana. No es que sea mala onda y no quiera a mi familia, pero neta abusan de mi generosidad. Por lo tanto cuando mi hermana me pidio hospedaje la mande mucho a la chingada, o sea, al Motel 6 (they leave the light on for you). Al principio no se puso muy feliz que digamos, pero termino agradeciendomelo mas tarde que temprano, y yo con eso me conformo.

* Obviamente estoy exagenrando. La mayoria de la comida en mi alacena, me la robo de casa de mis jefes. Because I'm slick like that you see! ;)